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La Mesa Departamental de Salud, en alianza con la OPS, toma acciones inmediatas para proteger la salud de las comunidades más vulnerables.

En respuesta a los crecientes desafíos de salud pública en Nariño, la Mesa Departamental de Salud, en colaboración con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y diversas organizaciones internacionales, realizaron un encuentro para abordar dos temas: los brotes de enfermedades y la crisis de salud mental que afectan a la región.

Durante la jornada, se acordaron medidas concretas para mitigar los problemas de salud en el departamento. Wilson Larraniaga, médico de Salud Pública en Emergencias y Desastres del IDSN, destacó las acciones inmediatas tomadas en Ipiales tras el reciente brote epidemiológico: “Se implementaron donaciones de filtros y tanques de agua por parte de la OPS para garantizar la calidad del agua, además de capacitar a las comunidades locales para reducir los casos.”

Por otro lado, Jhon Jairo Muñoz, médico de la dimensión de Convivencia Social y Salud Mental del IDSN, enfatizó la gravedad del aumento en los intentos de suicidio. “Cada 46 segundos, una persona se quita la vida en el mundo. En Nariño, priorizamos los municipios más vulnerables para reducir estas cifras alarmantes”, afirmó. Para enfrentar esta crisis, se han establecido salas situacionales en las áreas de mayor riesgo, donde los profesionales de salud abordan el problema de manera integral y personalizada.

Además, se ha fortalecido la línea de atención en crisis GLIA, que brinda apoyo directo a quienes enfrentan problemas de salud mental. Todas las estrategias implementadas se someten a evaluaciones continuas, con el fin de medir su efectividad a través de reportes y estadísticas que permiten identificar avances y ajustar las acciones según los resultados.

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